Yoshimitsu Yamada
8º Dan, Shihan
Presidente de la USAF
8º Dan, Shihan
Presidente de la USAF
Recuerdo que
unos años atrás, discutí mis puntos de vista y sentimientos sobre las
promociones de exámenes de Dan, y las recomendaciones para promociones en lo
que entonces era The Federation News (Noticias de la Federación).
Creo que frente
a los incidentes recientes que he vivido, este asunto necesita ser clarificado,
especialmente en el área de recomendaciones de Dan.
Ante todo,
cuando se trata de exámenes de Dan, yo comprendo que siempre habrá personas que
no estarán de acuerdo con mi criterio o mi juicio. Todo el mundo tiene el
derecho a su propia opinión sobre la persona que se está examinando. Pero
tengan en mente que estas opiniones son altamente subjetivas y no toman en
consideración los factores que yo, como instructor y observador imparcial, busco
al evaluar un alumno.
Por supuesto, mi
criterio o juicio decididamente está influenciado por la manera en la cual el
alumno ejecuta en el día del examen. Sin embargo, hay otros factores que yo
considero también, y usualmente estoy abierto a discutir estos factores con la
persona que ha presentado el examen. Un punto con el cual tengo una fuerte
opinión es que, contrario a lo que algunas personas piensen, mis decisiones
sobre exámenes de Dan no están políticamente motivadas, en cualquier sentido
que uno quiera interpretar eso. Yo acepto la entera responsabilidad de mis
decisiones en exámenes de Dan, y yo sugiero que mis años de estudio y enseñanza
de Aikido me dan una perspectiva claramente diferente en juzgar los exámenes de
Dan que cualquiera de la mayoría de los observadores casuales.
Ahora, cuando se
refiere a las recomendaciones durante el Año Nuevo para promociones de Dan, el
procedimiento es bastante simple. Las recomendaciones se basan únicamente en
las decisiones de cada Shihan individual. Cada uno de nosotros tiene su propia
razón o propias razones para las promociones de ciertos individuos. Pero aún en
esta situación única donde no hay observadores y no hay consultas entre
Shihans, algunas personas actúan como si este proceso fuese conducido como un
proyecto de ley en el Congreso, donde los individuos tienen un interés sobre el
resultado y se sienten obligados a intentar de influenciar las decisiones de
sus representantes.
Hablemos de
casos; el año pasado yo recibí algunas cartas de alumnos que sugirieron que sus
senseis fuesen promovidos a 5º Dan. Como he dicho antes, el proceso de
recomendación es estrictamente la competencia de los Shihan involucrados; no es
una situación tipo votos.
Yo aprecio el hecho
de que muchos alumnos admiren a su instructor, y ciertamente no me importa
saber esto. Mi opinión sobre sus sugerencias de promoción a 5º Dan es que deben
mostrar su aprecio a sus maestros través de practicar sinceramente y tomar
parte activa en la vida del dojo; no actuar como un promotor defensor de su
instructor. Les puedo decir que si mis alumnos escribieran al Hombu dojo
pidiendo por mi promoción, me sentiría enfadado, por no decir avergonzado.
Simplemente, no les compete; y esto es la verdad para cualquier dojo.
Otro rasgo de
estas cartas que yo recibí, y que debe ser tratado, es la declaración muchas
veces repetida que expresa, “él es el mejor instructor de la nación.”
Una vez más, yo
puedo comprender sus sentimientos sobre su instructor, pero no vayamos a perder
de vista el hecho de que la comunidad de Aikido en este país es bastante grande
y también hay un número bastante grande de instructores. Las declaraciones como
las que recibo vienen de una mentalidad estrecha frente a estos hechos, y son
similares a las que emiten los niños pequeños que creen que sus madres y padres
son “los mejores del mundo.” Pensamientos tales como estos muestran una falta
de madurez como también una falta de respeto para cualquier persona que está en
la posición de enseñar Aikido en los Estados Unidos.
Yo siempre
motivo a mis propios alumnos a respetar no solamente a mí sino a otros Shihan.
Yo quiero que ellos estudien o extraigan de estos otros Shihan las habilidades
o técnicas que yo quizás no tenga. Al final de cuentas, cada uno de nosotros
tiene algo que es únicamente propio de cada quien para ofrecer. Usted debe
descubrir lo que es, y luego llenar los espacios en su propio entrenamiento.
Antes de dejar
el asunto de las recomendaciones para promociones, tengo otro asunto que
cubrir. Debido a que el Aikido en los Estados Unidos ya casi cumple 30 años,
nosotros ya estamos viendo una generación más antigua y otra más joven de
practicantes. A medida que todo el mundo se torna más competente y
experimentado en la enseñanza, podemos esperar que el progreso de la generación
más joven será más veloz que de la generación previa. Ahora, ¿eso qué significa
en términos de promoción? Significa que debido a que solamente hay 10 niveles
de Dan en Aikido, es inevitable que la generación más joven alcanzará a la
generación más antigua en términos de obtener grados de Dan. Simplemente no hay
manera de mantener una distancia relativa de niveles de Dan entre los grupos
antiguos y jóvenes. Eventualmente, llegará un momento cuando algunos miembros
de la generación joven obtendrán grados equivalentes de Dan que sus mayores, y
hasta sobrepasarlos.
Por ejemplo,
desde que llegué a este país yo he sido promovido tres veces a un nivel de Dan
más alto. Durante ese tiempo, algunos de mis propios alumnos han sido
promovidos hasta por cinco niveles de Dan. Como su instructor, me siento muy
orgulloso de su progreso. Ese es mi premio como también lo es para ellos. Yo no
sería un muy buen maestro si mi mayor preocupación fuese de mantener a mis
alumnos a un cierto nivel de Dan sólo para que ellos no me puedan alcanzar
nunca.
También debería
ser obvio que a pesar del hecho de que algunas personas han estado practicando
por el mismo período de tiempo, habrá diferencias cualitativas entre ellos como
resultado de la intensidad de su entrenamiento. Un alumno que practica dos
veces al día, siete veces a la semana naturalmente progresará a un ritmo más
veloz que alguien que practica solamente dos veces a la semana, aun cuando
ambos han estado estudiando por la misma cantidad de años. Por favor mantengan
esto en mente antes de emitir juicios sobre cómo otros son reconocidos por su
progreso.
Antes de
terminar, quisiera tocar un tópico relacionado con lo que se podría percibir
como “una brecha generacional de Aikido.” Algunos miembros de nuestra
generación más antigua de practicantes de Aikido se han quejado conmigo que
ciertos practicantes de Aikido de la generación más joven no están practicando
a su gusto; específicamente, objetan lo que ellos denominan la práctica “dura”.
Ante nada, vamos
a recordar que el Aikido es un Budo, y no hay nada malo en infundir ese
espíritu dentro de la práctica de uno. Pero también es cierto que el Aikido es
muy adaptable, así que hay muchas maneras diferentes que uno puede practicar.
Parte del entrenamiento en Aikido es de aprender cómo acomodar estas diferentes
formas de practicar. Algunas son más adecuadas para los alumnos de más edad;
algunas entran en la jurisdicción de los más jóvenes.
No hay nada malo
con practicar “duro” mientras uno pueda. Esa es una inclinación natural por
parte de los jóvenes en la mayoría de los quehaceres o esfuerzos. Pero sí
quiero enfatizar que hay una diferencia entre practicar “duro” y ser brutal. No
apruebo que sean injustificadamente bruscos. Por ejemplo, no hay ninguna
justificación por poner presión adicional en una técnica luego que uke haya
señalado que él o ella hayan recibido lo suficiente.
Yo debo decir
que en mis viajes, todavía no he escuchado ninguna queja de los practicantes
más jóvenes sobre tener que practicar “suave”. Si las personas objetan esto,
entonces también deberán ser tolerantes a las necesidades y habilidades de los
otros. Vamos todos a apreciar la flexibilidad del Aikido para que se pueda
practicar por cada uno de nosotros en la manera particular de él o ella.
Pero sin
importar la forma en que usted elija practicar, es esencial que se mantenga
apegado a lo básico, concentrándose en hacer que su técnica sea clara y
positiva en su ejecución. Al fin y al cabo, debemos mantener el espíritu de Budo sin importar
cómo practicamos.
Gracias por compartir este documento de Yamada Sensei. Hace tiempo tuve ocasión de ver un fragmento, pero no estaba entero.
ResponderEliminarCon vuestro permiso, en breve lo compartiré en mi blog, y por su puesto os mencionaré.
Enhorabuena por vuestro trabajo.
Saludos.
T.L.S